Poderoso terremoto sacude a Japón
Un terremoto de 7.3 grados y varias réplicas de menor intensidad sacudieron al Noreste de Japón este viernes, provocando advertencias de tsunamis, las cuales fueron canceladas pocas horas después del sismo inicial.
Autoridades locales han dicho que no se han reportado muertes o daños mayores a la infraestructura de las zonas afectadas, aunque si se reportaron personas heridas.
El terremoto ocurrió a las 5:18 p.m. del viernes (3:18 a.m. hora del Este de Estados Unidos y 8:18 hora del meridiano de Greenwich), tuvo una intensidad preliminar de 7.3 grados y su epicentro estuvo localizado en el Océano Pacífico, a seis millas del fondo del mar y cerca de la costa de la prefectura de Miyagi, de acuerdo con la Agencia Meteorológica de Japón.
El área fue sacudida por réplicas menores posteriores, indicó también la agencia.
A raíz del sismo principal se emitió una alerta de tsunami, y se dijo que olas de hasta dos metros de altura podrían afectar a las zonas costeras.
En marzo del 2011 un terremoto de 9.0 grados de intensidad y un tsunami con olas de hasta 20 metros de altura provocaron la muerte de 20,000 personas en esa región, además provocó la peor crisis nuclear en 25 años después que la planta Fukushima Daiichi fuera destruida por el terremoto, resultando en la liberación de radiación en el mar y el aire.
Hasta el momento 325,000 personas afectadas por esa catástrofe continúan desplazadas.
Afortunadamente en esta ocasión el fenómeno natural no provocó daños en tal magnitud. En la ciudad de Ishinomaki, en Miyagi, autoridades locales dijeron que la altura del tsunami fue de menos de un metro, y en otras ciudades se reportaron tsunamis más pequeños.
La compañía de electricidad Tohoku, que opera la planta nuclear de Fukushima Daiichi, dijo que los tres reactores de la planta en Onagawa no sufrieron ningún daño.
A raíz del sismo, el servicio de trenes de la región y las operaciones del aeropuerto de Sendai, el cual fue inundado por el tsunami, fueron suspendidos.
También el aeropuerto de Narita, cercano a Tokyo, la capital de Japón, suspendió temporalmente sus operaciones, pero comenzó a operar normalmente poco después.